sábado, 20 de septiembre de 2008

Aida: hermosamente trágica

Pobre Aida; muchas tristezas la habitan. Es esclava en Egipto, después de haber sido la princesa de Etiopía; ama a Radamés, un guerrero egipcio del que está enamorada Amneris, la hija del Faraón. Radamés ama a Aida; la diosa Isis lo nombra para que dirija a las tropas egipcias a luchar contra los etíopes que ya van llegando a Egipto. Aida sabe que el rey de Etiopía, Amonasro, su padre, ataca para rescatarla y darle su lugar de princesa. ¡Qué dolor la habita!: su amado a luchar contra sus amados hermanos, padre y compatriotas. Termina el primer acto.

Pasa el tiempo. Llega el segundo acto. Amneris, la mezzo-soprano víbora doble cara, sospecha que Aida ama a Radamés y le dice que él ha muerto luchando contra los etíopes. Aida llora, se lamenta agudamente como sólo una soprano dramática lo puede hacer. Ese llanto, esas lágrimas son la prueba para Amneris de que Aida ama a Radamés. La víbora confieza que ha mentido sólo para descubrir la verdad, que Aida se olvide de Radamés; ella siempre ha obtenido lo que quiere, ella es la princesa de Egipto. Aida casi confieza que es una princesa también, pero calla, se humilla, llora y suplica a Amneris que tenga compasión de ella. Pero Amneris le dice:

Trema, o vil schiava! (¡Tiembla, oh, vil esclava!)
Spezza il tuo core. (Destroza tu corazón.)
Segnar tua morte può quest'amore. (Significar tu muerte puede este amor.)
Del tuo destino arbitra sono. (De tu destino árbitra soy.)
D'odio e vendetta le furie ho in cor. (De odio y venganza las furias tengo en mi corazón.)



Vuelve triunfante el ejército egipcio y los acompañan las trompetas de esa marcha que acompaña a los graduandos en los actos de graduación en nuestro país (¡si Verdi supiera!). Traen consigo a los prisioneros. El Faraón le dice a Radamés que puede pedir lo que desee, que nada le será negado y, también, le da la mano de Amneris como premio. Radamés pide que se le perdone la vida a los prisioneros, compatriotas de su secreta amada Aida mientras ve cómo la angustia la hace más bella. Aida sufre. Los dioses parecen no apiadarse de su dolor. En las dos primeras escenas de los dos primeros actos, Aida termina en la misma posición, clamando a los dioses. Pero parecen no oir.

Y la historia sigue hasta un tercer acto, llevada por una hermosa música compuesta por Giuseppe Verdi (1813-1901). 

Y mi piel se eriza con los enormes ensambles donde los solistas y el coro cantan heróicos, solemnes, guerreros. También me emociono cuando Amneris interviene. Es un personaje muy hermoso actoral y musicalmente hablando. Las partes de los ritos a los dioses egipcios son verdaderos deleites: muchas voces cantando suavemente logran un efecto casi hipnótico.

Pudiera hablar horas de todas las cosas que me gustan de AIDA y de FALSTAFF (de Verdi), de CARMEN (de Bizet) o DIE ZAUBERFLÖTE (de Mozart) que son las óperas que más conozco. Me encanta cómo literatura, teatro, música, artes plásticas, peluquería, maquillaje, etc. se unen en una sola cosa y resulta algo grandioso y complejo. Me muero por ver óperas contemporáneas como TEA o THE FIRST EMPEROR de Tan Dun o SATYAGRAHA de Phillip Glass. Aún estoy pendiente de ver óperas de Wagner que se ven épicas monstruosas. Sueño con, alguna vez, ver una producción del Metropolitan Opera House en New York... ¡Ah la ópera!, me hace suspirar y escribir oraciones que comienzan con una exclamación.

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En la imagen, Aida está arodillada en la esquina inferior derecha, el faraón está al centro y los prisioneros etíopes junto con Amonasro suplican a sus pies. Radamés y Amneris están tomados de las manos a un lado del faraón. El pueblo y algunos sacerdotes observan la acción. 

4 comentarios:

Orpheo dijo...

Ahh, Aida! He andado con Carmen pegada en la cabeza y cantando el terceto de las cartas caminando en la calle. Ahora me has dado ganas de ver Aida y de ver Aida con vos.

Por cierto, "D'odio e vendetta le furie ho in cor" es literalmente "del odio y la venganza las furias tengo en el corazón".

Nadie dijo...

Ya decía yo que algo no cuadraba con la traducción de esa parte en un libreto que encontré en Geocities que está en italiano y español. Ya lo cambié. Sabía que me ibas a dar la traducción correcta.

También vi Carmen hace dos días y esa parte de las cartas me recuerda a vos. Quiero comprar el DVD de Die Zauberflöte y Tea de Tan Dun.

Orpheo dijo...

Hablando de la parte de las cartas, me encanta esta interpretación que es muy diferente a la del Met, sobre todo en cuanto a la relación entre los personajes.

http://www.youtube.com/watch?v=Bb3EWSqFsao

Besos

Markos dijo...

eyyyyyyyy se de lo q hablas yo vi esto puya siento alegria saber de que hablas enserio, me gusto ver Aida solo que no habia entendido si ellos murieron , pero si me di cuenta de que murio