Sos el único que puede aparecer.
Me entristezco la tarde
de ver que no te quiero tanto
ni te amo, por suspuesto,
porque la fuerza de lo que siento no basta
para jalar el piso, las aceras,
las calles y jardines,
las casas y las gentes;
hasta tenerte frente a mí
caminando incomparablemente lindo
con tu pelo negro sobre tu cara
y tus cejas negras sobre tus ojos,
sobre cada uno de ellos,
claros,
que me encuentran, por casualidad,
sucio,
al lado
de la montaña más grande de cosas y, vulnerable,
completamente destruible.
3 comentarios:
Hermoso.
Te van a descubrir... no des tantas pistas, detalles. (carita afligida)
Mente Policromada, gracias muchas.
TITO, me vale.
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